¿Por qué debes montar tu propia tienda online en 2017?
La crisis, la rápida evolución del mercado y del marketing, la necesidad de ahorrar en costes, las redes sociales como una útil herramienta para tener una mejor interacción con tus clientes… hay muchas razones por las que pensarse dar el salto en nuestro plan de negocio a Internet mejorando la calidad del servicio y, al mismo tiempo, para darte a conocer y ampliar tus oportunidad de mercado a la “aldea globalizada mundial”.
Existe además un importante aliciente que hará que te lo replantees en medio de la actual crisis económica y es que las ventas de e-commerce palian el descenso en las ventas de otros canales más tradicionales.
Según el último informe sobre comercio electrónico a través de entidades de medios de pago de la Comisión del Mercado de las Telecomunicaciones (CMT), la Autoridad Nacional de Regulación (ANR) del sector que ha analizado a 17 países de la Unión Europea, asegura que todos ellos contarán con una tasa media anual de crecimiento del 11% del e-commerce. En el caso de España, será el país que más crecerá en los próximos 4 años con un 18%, lo que supondrá un 9,1 mil millones de euros en ventas en este 2017.
Estos datos son estadísticas sobre el papel pero a nivel práctico son multitud de beneficios directos los que te puede reportar tener una tienda online independientemente del sector en el que quieras emprender.
Estos son algunos apuntes que te pueden guiar si te estás planteando montar tu propia tienda online:
1. La tendrás permanentemente abierta. Una de las grandes ventajas de tener nuestra tienda online es poder ofrecer nuestros productos o servicios las 24 horas de los 365 días. Eso sí, el tema de atención al público mediante teléfono, whatsapp u otros canales como skype lo podrás fijar a tu criterio y necesidades funcionales.
2. Emprender es más barato. No tendrás que hacer un gran desembolso inicial de dinero como cuando montas una tienda física en la que aparte de los trámites burocráticos que ralentizan la operación, necesitas invertir en la decoración, en el mobiliario, en los gastos de luz y agua y de personal (si te lo puedes permitir) lo que te permitirá conseguir precios más competitivos frente a otros emprendededores de tu mismo sector. Además, lograrás una rentabilidad a menor plazo pero, ojo, eso si inviertes tiempo y esfuerzo en mejorar tu tienda virtual porque no sirve montarla y pensar que automáticamente te lloverán los clientes. Necesita que la trabajes e inviertas el mismo esfuerzo o más que pondrías en una tienda física.
3. Tienes muchas más herramientas para estudiar a tu cliente y tu nicho de mercado. Las plataformas de ecommerce ponen a tu disposición una amplia gama de herramientas de marketing online y de analítica web para no solo medir al detalle el comportamiento de nuestros clientes, sino también sus gustos, si un producto o servicio novedoso puede funcionar, los aspectos que debemos reforzar de la marca e incluso la efectividad de promociones, campañas y ofertas.
4. Llegarás hasta potenciales clientes de cualquier parte del planeta. Mediante una tienda convencional el público está reducido a la zona donde tengas tu mercado y al boca a boca que es interesante pero limitado, Mientras que con la venta online llegarás a clientes potencial que estén situados en cualquier parte del planeta. Eso sí, necesitarás de una buena y efectiva campaña de marketing online y los límites los marcas tú.
5. La gestión de negocio es más eficaz. Siempre que tengas una tienda online debes informarte para tener un sistema fiable de pago electrónico como, por ejemplo, el paypal además de contactar con una empresa de paquetería que te garantice los envíos en los tiempos que le marques. Es lo que se llama un servicio eficaz de atención al cliente. No necesitarás tener un trato directo con tus potenciales clientes pero si deberás comprobar que tienes una buena cartera de proveedores y distribuidores. El boca a boca también funciona en Internet a través de los comentarios que se dejan en foros de opinión y chats.
6. No necesitas tener grandes stockajes. Para comenzar necesitarás proveerte de un stock inicial que te sirva de escaparate pero, después, para poder servirlo al cliente es mejor tener una buena cartera de proveedores que te pueda servir el productos y servicio a tiempo para que puedas enviárselo a tu cliente o incluso no hacerlo hasta que el cliente ha efectuado el pago.
7. Las compras online son cada vez más habituales y populares. Todos alguna vez hemos comprado cosas desde su casa o desde el trabajo usando el ordenador o el dispositivo móvil. Hoy en día, no puedes adquirir un billete de avión si no lo haces a través de ordenador y hasta las amas de casa hacen la lista de la compra online. El tiempo es uno de los factores principales que hacen que el consumidor efectúe por Internet una compra, ahorrándose desplazamientos al centro comercial o al supermercado. Eso sí, para eso debemos tener una tienda online que sea sencilla e intuitiva para que el cliente potencial no se pierda.
8. Anticipación a nuestros directos competidores. Hoy en día la presencia en Internet es fundamental si queremos ser competitivos porque otros ya se han adentrado en ese mercado y nos han quitado parte del pastel. Estar en Internet nos permite estudiar a nuestros clientes, saber si un producto o servicio va a funcionar y hacer lo que se conoce como branding para fidelizar a los clientes. Además, podemos cambiar la página introduciendo ofertas de última hora y promociones que nos sirvan para tantear y fidelizar a nuestros clientes casi instantáneamente.
Lo que debes tener en cuenta cuando crees tu tienda online es que debe aportar algo nuevo y diferencial, presentar una imagen cuidada y, al mismo tiempo, que sea fácil de manejar y casi intuitiva y, sobre todo, trasmitir mucha confianza para que podamos vender. Así construiremos una imagen de marca.